FSA 86 - Sistema AP

Con la motoguadaña a batería STIHL FSA 86 R, podrás recortar los bordes del césped a lo largo de caminos y obstáculos de forma limpia y eficiente. El césped pequeño también puede ser cortado por jardineros aficionados, pequeñas empresas y cuidadores gracias al potente motor EC con un rendimiento de trabajo constante. Además, el funcionamiento especialmente silencioso de la motoguadaña permite trabajar sin protección auditiva en entornos sensibles al ruido. Gracias a la tecnología de baterías, la secuencia de arranque es especialmente sencilla y sin esfuerzo, y la FSA 86 R se puede utilizar inmediatamente con sólo pulsar un botón.

Las baterías del Sistema AP están protegidas en la carcasa del motor en el mango, de modo que el peso ligero y el centro de gravedad equilibrado de la batería en el eje del eje garantizan un uso sin esfuerzo de la motoguadaña, especialmente durante largos periodos de uso. El empuñadura circular ergonómica con superficie suave y el control de velocidad continuo de la motoguadaña a batería STIHL FSA 86 R también ofrecen un alto nivel de comodidad en el trabajo.

La motoguadaña es compatible con tres herramientas de corte diferentes, que puedes sustituir sin necesidad de herramientas. Puedes rellenar el cabezal de corte de dos líneas integrado de serie < /strong> STIHL AutoCut C 6‑2 con un diámetro de corte de 350 mm a mano. Simplemente inserte el hilo de corte en la carcasa desde el exterior. Dependiendo de sus necesidades, también puede utilizar el cabezal de corte STIHL PolyCut 6-2 con cuchillas de plástico o el cabezal de corte STIHL DuroCut 5-2con piezas roscadas con la motoguadaña a batería FSA 86 R. Nuestra sección de guía le muestra cómo cambiar la herramienta de corte en una motoguadaña. El soporte distanciador de la FSA 86 R evita daños a plantas, objetos y a la propia herramienta eléctrica al trabajar con los distintos cabezales de corte.

Todas las herramientas a batería del Sistema AP de STIHL ha sido diseñadas para usuarios profesionales y para el trabajo diario, incluso en condiciones climáticas adversas. Por este motivo, están certificados como resistentes a salpicaduras. La eficacia de esto también se verifica mediante exigentes pruebas internas. La prueba de salpicaduras de agua está alineada con el estándar IPX4, entre otros.